Se trata de los campings de “Los Vives”, del Valle de Chistau y del Parque Posets Maladeta, “Camping Pineta” y “Camping Valle del Bujaruelo”, en el Parque Nacional de Ordesa y el Monte Perdido, y “El Puente”, en Rodellar.
Los cuatro campings reciben miles de clientes cada verano, especialmente familias amantes de la naturaleza de España y de países como Francia, Alemania, Holanda y Bélgica. Un turismo que ha crecido desde la Covid-19 y, especialmente, en la post pandemia.
Se trata de un turismo activo que, además de senderismo, contempla numerosas...